La sombra del Mesías “LAS DOS SIMIENTES”

Las dos simientes

…y enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; ella te herirá la cabeza, y tú le herirás el calcañar. (Gen 3:15)

En este   pasaje  muchas cosas hemos escuchado respecto de el  pero cualquiera sea el caso; hasta ahora, son muy pocos los que lo comprenden, y varios que creen entenderlo o dicen entenderlo. Muchas teorías hay, y muchas doctrinas contradictorias. Es tan importante este momento porque marca la evolución y el destino espiritual del alma humana. Como curiosidad la ciencia denomina Eva mitocondrial y  recibe su nombre de la Eva que se relata en el libro del Génesis de la Biblia. a la línea genealógica por vía materna de cada persona en el árbol genealógico de toda la humanidad, la Eva mitocondrial correspondería a un único antepasado femenino de la cual desciende toda la población actual de seres humanos.

Empezaremos por la definición de simiente:

La simiente o semilla, por lo tanto, es el fundamento  que  permite dar origen a un nuevo ser. Las simientes se producen con la maduración de un óvulo; al contener un embrión, permiten el desarrollo de nuevas vidas si se cumplen las condiciones apropiadas.

La primera vez que aparece la palabra hebrea zera en las escrituras es en Gn. 1:11, cuando Dios ordena que la tierra produzca hierba que dé semilla (zera). La semilla que dan las hierbas son por una unión del tipo sexual, donde dos sexos se unen para formar un nuevo ser. Es un óvulo (oósfera) fecundado. Por tanto el término zera es perfectamente aplicable también a la concepción femenina, tal como citaremos la simiente de la mujer. Inclusive hay una asociación bastante interesante que podemos hacer, y es que zera y semen son usados como sinónimos, sin embargo semilla es una parte femenina en la que ha actuado la parte masculina. ¿Qué significa ésto? Que inclusive la semilla o simiente de la mujer se define a partir del instante en que la zera masculina toma parte en el proceso.

¿Y quien o que es la simiente de la serpiente?

Algunos dicen que Caín , otros dicen que la simiente de la serpiente es el anticristo; otros que es el conocimiento del pecado, al haber comido del fruto prohibido, otros dicen que es Judas Iscariote, otros los fariseos, otros los hijos del mal, otros el eslabón perdido, etc. No se tu cuantas teorías has escuchado aparte de las que te menciono, deben haber muchas más…

La simiente de la serpiente, es la semilla que la serpiente sembró en la mujer (y el hombre); al pecar estos, y no haber creído a Dios; sino haber obedecido a la serpiente (diablo); en el acto del hombre de creer y obedecer sus engaños , esté sembró su semilla corrupta en la humanidad; y esa semilla o semiente es el pecado. Así es, el pecado, es la simiente de la serpiente.

La semilla de la serpiente:

  1. Cuestiona a Dios.
  2. Niega el mandamiento, invirtiéndolo; por tanto incita a hacer lo contrario
  3. Se presenta como ; conocedor de la voluntad de Dios. Declara la verdad a cerca de las consecuencias de la desobediencia: serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios sabiendo lo bueno y lo malo. El separar lo bueno de lo malo le compete a Él, tal como dice desde el principio: “Y separó Dios la luz de la oscuridad” (Gn. 1:4). Ni siquiera Dios informa al hombre de esta posibilidad hasta que lo hace la serpiente. De allí su cualidad de adivinar. En este acto no todo es mentira; pero no es una actividad permitida por Dios. Por su parte, el hombre no puede separar una de la otra sino es por la sabiduría de Dios. Pero la serpiente procura distorsionar esta instrucción ubicándose en lugar de la mente de Él, y dando un mensaje engañoso.  Por eso la serpiente dice lo contrario (no moriréis), pero a la hora de la explicación engaña al hombre mezclando la verdad con la mentira; pues es cierto que serían como Dios en el sentido de distinguir entre bueno y malo; la aptitud les sería dada, pero era mentira que no morirían, y además que dicho discernimiento funcionara para lograr sabiduría; por lo menos la verdadera.
  4. Oculta  a la mujer el hecho que fallaría en saber lo bueno y lo malo: Esto estaba oculto, por tanto la serpiente no podía revelar algo que corresponde a Dios.
  5. Critica a Dios de retener actividad vital para el desarrollo humano. Queda claro que las maldiciones y castigos subsecuentes que veremos son disparadas por la desobediencia del hombre, pues la serpiente podría haber hecho todo lo que hizo, pero el hombre mantenerse firme en el mandamiento. La actividad de la serpiente es parte de su astucia y la capacidad de tentar al hombre, a pesar de no tener luego éste como conocer lo oculto.

Así, la mujer convierte en “óvulo” de la semilla de la serpiente:

  1. Oye al serpiente: Oírle no era malo, sino creerle y seguir sus premisas engañosas contrarias a la voluntad de Dios.
  2. Cree al serpiente.
  3. Agrega al mandamiento: “No tocaréis el árbol.”
  4. Toca el árbol, a pesar de haberse autoimpuesto que eso era prohibido por Dios, y que por tanto no se podía hacer; le es agradable a la vista (todo árbol fue hecho así). Agradable en este caso está en hebreo con el verbo חָמַד jamád; en el texto como: nejmád (siendo preciado); es el mismo verbo usado tanto en 2:9 como en 3:6.
  5. Desea el árbol para alcanzar la sabiduría: allí se procede a la siguiente fase de este error, pues una cosa es percibir algo como agradable, poder mirarlo y desearlo, pero otra es caer en el espejismo de aceptar un fin que no se logrará nunca de esa forma. En otras palabras, una cosa es desear este conocimiento para tener sabiduría, y otra es trastornar los mandamientos y premisas dadas previamente por Dios. La Mujer no toleró que Dios les estaba ocultando algo, y que ese algo es hacerse sabios por ejercer por si mismos el discernir; y además, se hace toda una negación de que el transgredir implica muerte. Cualquier actitud era aceptable excepto el acto de comerlo. Recordemos que hasta el acto de desear profundamente por el hecho de ver algo tan agradable a los ojos, hasta llegar a tocarlo, no está dentro de la prohibición dada.
  6. Cede ante las declaraciones de la serpiente, desobedeciendo y comiendo del fruto.
  7. Da al marido de comer del fruto.

Cuando el hombre cayó, Dios dijo a la serpiente :y enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; ella te herirá la cabeza, y le herirás el calcañar.

Pablo lo identifica como algo en él, que lo lleva al mal algo que está en su carne y lo lleva cautivo al pecado en la carne:

De manera que ya no soy yo quien hace aquello, sino el pecado que mora en mí. Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo. Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago. Y si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí. (Rom 7:17-20)

Todos nacemos con el pecado en nuestra carne, herencia de nuestros padres, y de los padres de nuestros padres, y de los padres de los padres de nuestros padres, hasta llegar a Adán y Eva; quienes recibieron el pecado de la serpiente, la simiente de la serpiente. Eva

¿Y como lo recibieron? Lo recibieron de la misma manera, en que los que hemos nacido de nuevo, recibimos la nueva simiente de Dios es decir, a Cristo; por creer. La humanidad recibió la simiente del diablo por creerle al maligno; y en el evangelio recibimos la buena simiente (Cristo) por creerle a Dios. ¿No es maravilloso, como Dios es perfecto en armonía y justicia?

Adán y Eva, le creyeron a Satanás, y no pensaron que comiendo del árbol del conocimiento del bien y del mal morirían, como Dios lo dijo; creyeron la mentira del diablo (que no morirían) y desobedecieron a Dios; y recibieron la simiente del diablo, el pecado en su carne.

Ambas simientes están en enemistad, en cada uno de nosotros, los que hemos creído, como dice la Biblia:” y enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu simiente y su simiente”

Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.(Gal 5:17)

El pecado que mora en la carne, está en contra con el Espíritu del Señor (que mora en nuestro corazón); hay una lucha en cada verdadero hijo de Dios, hay una batalla, una guerra; entre la simiente de la serpiente y la simiente incorruptible de Dios. Hay dos naturalezas en nosotros que combaten a muerte.

No es así, en los que son aún esclavos del pecado; que no han recibido la buena simiente la buena semilla que es la Palabra de Dios, quien es Cristo.

Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. (Juan 8:34)

Las consecuencias y maldiciones.

Para la serpiente:

  1. Maldita entre las bestias del campo: como voz interna es maldecida entre todas, genera las pulsaciones y deseos que llevan a cambiar lo bueno por malo y lo malo por bueno. Oír, creer y hacer según la serpiente es desobedecer a Dios, esto es muerte, polvo, lugar donde se desplaza la serpiente, y come. El humano se pierde en un dualismo, y así en sus ramificaciones sucesivas.
  2. Andará sobre su pecho: No tiene poder para llegar muy lejos debido a la falsa sabiduría reinante, y se relaciona directamente con el polvo de la muerte y el pecado.
  3. Comerá polvo todos los días de su vida: participará de la muerte del hombre, del sheol.
  4. Enemistad con la mujer, y de su simiente con la simiente de ella: El imperio de la falsa religión, falsos Mesías y sus seguidores en enemistad con la simiente de la mujer hasta el fin de los dias .
  5. La simiente de la mujer destrozará la cabeza de la serpiente: el Mesías destruye el mecanismo intelectual y el poder de la religión falsa, así como toda tendencia a la rebeldía.
  6. La serpiente acechará el camino de la simiente de la mujer: acecho de esta bestia en el camino de los justos, pero acecho no es necesariamente victoria, la cual está reservada para el linaje escogido y de los benditos por éste.

Mujer:

  1. Multiplicación del dolor de la preñez, pues multiplicó el mandamiento: Dice claramente que “Multiplicara” en gran manera el dolor . Si meditamos un poco,entenderemos que no se puede multiplicar un numero por cero. Para multiplicarse necesita un numero, sea uno, o mas. Pero ahora aumenta la estrechez de la matriz. Ahora todo es mas duro, en un sentido espiritual el mundo se ve envuelto en una estrechez donde creer se hace bajo una presión muchas veces casi imposible. Hasta  que sea redimida por el Mesías toda la creación sufre dolores de parto y esto incluye también al hombre.

Pues sabemos que la creación entera a una gime y sufre dolores de parto hasta ahora. (Romanos 8:22)

  1. Deseo hacia el marido, pues deseó el árbol para la sabiduría viéndolo como bueno, y comiéndolo. También la autoridad del hombre sobre la mujer, pues no consultó con su marido que era administrador de la tierra: Gn. 1:28), .

Hombre:

  1. Oyó la voz de la mujer sobre comer el árbol, por tanto maldita la tierra por su causa, pues el es polvo del suelo; dolor para comer de donde crecen los árboles, produciendo espinos y cardos, y sudor para poder obtener fruto.
  2. El hombre desciende a otro nivel: la creación también desciende de nivel “maldito el suelo”.
  3. Por tener que cuidar de los árboles, maldito el campo produciendo cardos, que son descuido de la correcta ministración del huerto (el huerto había sido puesto en forma natural, no necesitaba cultivo): cuando descuidamos nuestra siembra la asolan espinos y malezas que la destruyen y ahogan el huerto.
  4. La creación también se hace necesaria de la redención y esta desajustada hasta que llegue ese dia.

Ahora, volvamos a leer Génesis 3:15 con sus debidas aclaraciones:

“Y pondré enemistad [hostilidad] entre ti [Satanás] y la mujer [Eva], y entre tu simiente [los seguidores de Satanás] y la simiente suya [los descendientes de la mujer por vía de Cristo el Libertador]; ésta [Cristo—la Simiente prometida, el Libertador mismo] te herirá en la cabeza [el golpe de muerte—la victoria definitiva de Cristo sobre Satanás y la destrucción terminante y eterna de Satanás (véase Ezequiel 28:18, 19 y Apocalipsis 20:6-9)], y tú [Satanás] le herirás en el calcañar” [la muerte de Cristo en la cruz—una herida grave, pero no permanente, porque él se levantó de los muertos, teniendo las llaves de la muerte y del Hades o sepulcro (Apocalipsis 1:18), después de haber saqueado por completo el imperio y la potestad de Satanás]”.

Jesús con esta parábola aclara quien es quien.

Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre.El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del malo.El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del siglo; y los segadores son los ángeles De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego, así será en el fin de este siglo.Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes. Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.                                                                                                                    (Mateo 13:37 al 43)

  1. La Buena simiente fue creada por el Hijo del Hombre.
  2. La buena simiente, los  son genéticamente, espiritual y proféticamente los hijos de Dios.
  3. La cizaña (la simiente de la serpiente) son hijos genéticos e espirituales de Satanás.
  4. El enemigo que engendró la cizaña es la misma serpiente de Génesis 3:15
  5. Los hijos de Dios (trigo) heredarán entonces el Reino después de que la cizaña  sean destruidos.

Nuevamente, como declara en el verso 38, El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del malo.” Esto no es solo un linaje físico, sino también espiritual.

Los dos venenos.

Mirad, os he dado autoridad para hollar sobre serpientes y escorpiones, y sobre todo el poder del enemigo, y nada os hará daño. (Lucas 10:19 )

Si todo el problema fuese el aplastar dos clases de bichos “Serpientes y escorpiones” todo seria mucho mas fácil y sencillo, bastaría con llamar a una empresa de profesionales que se dedican a ello y todo seria cuestión de métodos químicos  y  de captura de estas empresas especializadas. Pero detrás de todo hay una realidad mas profunda. El veneno de la serpiente es un “veneno ardiente”, el ardor y la pasión por los anhelos por una espiritualidad corrompida. Una segunda amenaza espiritual es la del veneno del escorpión produce “frialdad”, la apatía que deja a la persona indiferente a cualquier necesidad y conocimiento espiritual.

La serpiente inyecta a la persona un veneno “ardiente” (seudoreligiones), mientras que el veneno del escorpión es “frío” (materialismo). Pero detrás de estos “bichos” se esconde la mano de Amalec que actúa de generación en generación.

Esaú, la Simiente de la Serpiente

Hay dos grupos diferentes de personas a través de la Biblia y en nuestro pasado, y futuro. Aquellos quienes son elegidos para gracia mientras que otros son elegidos para ira y destrucción. Estos son dos grupos diferentes con dos elecciones específicas y solo ellos pueden mantener estas elecciones, nadie mas es como ellos.

¿Es esta una simiente específica? No. aunque parece sonar como tal, esto no significa esto en lo absoluto. Sería como decir que todos aquellos nacidos en una simiente maldita están perdidos condenados al infierno y que todos aquellos nacidos dentro del linaje escogido de Dios tienen como recompensa el cielo.

Hay tres aspectos principales que entran en juego todo el tiempo en cuanto a todas las cosas. Las elecciones que hace Dios, las elecciones que hace satanás, y las elecciones individuales que hacemos nosotros.

Esaú nació de buena simiente o linaje pero él escogió el camino del mal. Tanto como aquellos nacidos de simientes malditas pueden elegir ir por el camino de justicia. ¿Elegimos o somos escogidos antes en el tiempo para hacer exactamente lo que hoy hacemos? Dios conoce el final desde el principio y El conoce a aquellos que son suyos y aquellos que no lo son. El conoce exactamente lo que va a pasar. Y El coloca sus vasos de honor escogidos dondequiera que El desea, entre buena o mala simiente. Y Lucifer hará lo mismo, excepto que sus vasos son de deshonor.

Algunos dicen que toda la guerra comenzó con Jacob y Esaú, cuando realmente esto va más atrás hacia Caín, y en estos últimos días esto va a culminar con la simiente de Caín a través del Anticristo tratando de destruir y aniquilar la simiente de Jacob.

Recuerda que fue Esaú quien se casó dentro de la raza maldita de Caín, corrompiendo su simiente y su descendencia. El no nació de una simiente maldita, el volvió su espalda a su buena simiente y se fue por el camino de la mala. Caín es mencionado en hijo del maligno :

no como Caín que era del maligno, y mató a su hermano. ¿Y por qué causa lo mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas. (!Juan 3:12)

Y por último, ya fuimos crucificados con Cristo, y por lo tanto, estamos muertos en la carne, y el cuerpo de pecado fue destruido (la simiente del diablo está bajo  Cristo, y por lo tanto, sin poder).

…sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado. Porque el que ha muerto, ha sido justificado del pecado. (Rom 6:6-7)

Este es un tema muy importante para meditar y reflexionar; las dos simientes. La pregunta seria :

¿Cual gobierna tu vida?

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Categorías:estudios

6 respuestas


  1. José, mi nombre es Natalie y le digo que me gustó mucho su artículo, todo lo que he leído ha sido muy bueno. Me gustaría preguntarle si alguna vez ha leído los Targums, son la traducción de la Biblia del arameo al español o a otros idiomas. Me responde y seguimos conversando. gracias


  2. Profesor, antes que nada aprovecho para saludarle y darle las gracias por su tiempo que nos dedica en clase en el IBCF, doy gracias a Dios por su vida, y doy gracias por toda la iluminación que el Señor le ha dado para compartir este artículo, me ha llevado a tener una hambre por estudiar y poner por obra lo aprendido, me quedé mucho rato reflexionando sobre Lucas 10:19, y aprendí que hollar también es patear…

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