Muy bueno , que bueno es tener el punto de vista de un periodista, que por su profesión sabes distinguir cuando algo es para avivar y cuando algo el verdadero, se de cuenta que negar a Dios , es negar nuestra propia existencia. Además si Dios no existiera no se tendrían que porque preocupar tanto, pero el Espíritu Santo , toca los corazones y deja esa inquietud.
Dios no está muerto.
Muy bueno , que bueno es tener el punto de vista de un periodista, que por su profesión sabes distinguir cuando algo es para avivar y cuando algo el verdadero, se de cuenta que negar a Dios , es negar nuestra propia existencia. Además si Dios no existiera no se tendrían que porque preocupar tanto, pero el Espíritu Santo , toca los corazones y deja esa inquietud.
Dios no está muerto.